jueves, 9 de junio de 2011

Actitud goleadora

Atacar el arco y ganar posición. Resistir la presion estoicamente cuando se está cerca. Ser un trabajador incansable cuando se está lejos del arco, agresivo, valiente, inteligente, prudente, oportunista. Marcar presencia cuando las defensas rivales están debiles, pero camuflarse cuando son fuertes: para sorprender. El goleador va a romper el cerco defensivo con despliegue físico, gambetas y cambios de ritmo, sin descuidar su posicion estrategica -siguiendo la jugada desde su inicio a fin-, comunicandose con su equipo.

Un goleador estima a sus defensas y creadores porque en ellos, se inicia la jugada que él tiene que finalizar. Nervios de acero y resistencia han de sostener la actitud del goleador cuando se lo solicita en el area, pues, cuando todo tiembla, él tiene que tener la sangre fría, cuando todo se confunde y se remece, él tiene que tener claridad y fortaleza, autocontrol y rapidez mental. A ello solo se llega con esfuerzo y meditación, practicando.

Un goleador, solo se hace con humildad y esfuerzo. Ser goleador es la culminación de un proceso personal, y la coronación de un esfuerzo en equipo. No es suficiente calentar la sopa o meterle goles a equipos chicos. Hay que aprender, evolucionar, progresar. Crearse las oportunidades con esfuerzo, paciencia e inteligencia, y aprovecharlas con liviandad, rapidez y agresividad. La concentracion goleadora se sostiene hasta el final, y tiene siempre en el horizonte de su mente el arco rival. En el camino, el goleador debe forcejear con sus rivales para ganar posición, pero no debe ofuscarse ni destemplarse con los roces o la adversidad. La rabia destemplada conduce a desiciones apuradas y sin visión. Hay que autocontrolarse para controlar al rival. Solo si se controla el juego del otro se pueden romper sus defensas. Hay que conservar liviandad y honor en el espíritu del guerrero.

...

No hay comentarios: